La Taba fue sin duda una de las experiencias más bonitas de mis días en BA. Familia, amigos, cerveza, vino, fernet, asados, boliches, francesas, la vela puerca, la bersuit, terraza, laburo, etc. Muchos recuerdos grabados para siempre.
Mi llegada a La Taba se dio gracias a Jaque, una linda Colombiana compañera de posgrado de Lishe. Ella al saber que yo estaba en búsqueda de un lugar para instalarme le recomendó La Taba, no se equivoco, después de tantos lugares visitados e igual número de decepciones, llegar a La Taba fue un gran aliciente, desde que llegue y lo conocí, sentí la magia del lugar.
Ya tenía 3 noches durmiendo en la casa de Lishe, ahí no había lugar, no me podía quedar por más tiempo, era imperioso salir y no encontraba un lugar bueno, bonito, decente, aseado y barato; por suerte contaba con la colaboración de Lishe y gracias a ella y a Jaque que le habló de La Taba, fue que pude llegar al lugar que me alojó por más de 4 meses.
La Taba es un lugar que cuenta con "ambiente familiar, atendido por sus propietarios" (frase típica colombiana). Patricia Perez es la mamá argentina de todos los que nos hospedamos en su lindo hostel, sin duda mis días en La Taba fueron mejores gracias a su cariño que se siente verdadero. Toda la familia del hostel es muy buena onda y están dispuestos a hacer de tú estadía un momento agradable.
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